Durante 2020 se registraron en España 492.930 fallecimientos, un 17,7% más que en 2019, según los datos presentados este jueves 17 de junio por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Por meses, cabe destacar los aumentos de defunciones en marzo y abril, del 56,8% y 78,2%, respectivamente, en relación con los mismos meses del año anterior. También cabe reseñar la evolución de la mortalidad a partir del mes de agosto. Sobre todo en octubre y noviembre, cuando el número de defunciones se incrementó un 21,0% y un 21,6%, respectivamente, respecto a los mismos meses del año anterior.
Según edad y sexo el mayor incremento con respecto a 2019 en términos relativos se observa en el grupo de 75 a 79 años, tanto en hombres (con un incremento del 25,0%) como en mujeres ( 22,4%).
El aumento de la mortalidad provocó que la esperanza de vida al nacimiento disminuyera en 1,24 años en 2020; se situó en 82,34 años. Por sexo, el descenso fue mayor en los hombres (la esperanza de vida al nacimiento bajó 1,26 años hasta 79,60), que en las mujeres (con una reducción de 1,15 años, hasta 85,07). De acuerdo a las condiciones de mortalidad del momento, una persona que alcanzó los 65 años en 2020 esperaría vivir, de media, 18,36 años más si es hombre y 22,33 más si es mujer.
La tasa de mortalidad infantil aumentó una centésima en el año 2020 y se situó en 2,66 defunciones por cada 1.000 nacidos vivos.
Como resultado del aumento en el número de defunciones y de la disminución en el número de nacimientos, el crecimiento vegetativo de la población residente en España (es decir, la diferencia entre nacimientos de madre residente en España y defunciones de residentes en el país), fue negativo en 153.167 personas en el año 2020.
Fuente: Revista Funeraria